¿En qué momento empecé a echarte tanto de menos?
Simplemente lo experimento, pero no atisbo el por qué.
Siempre pensé que sería una veinteañera- treintañera independiente, medio bohemia -medio chic, con mi trabajo, viviendo sola, con mis tazas de café en los días lluviosos mientras miro la gente correr para no mojarse y soltera por tener tantos tropiezos amorosos o por simplemente elegir de forma nefasta
Y me sorprendo a mitad de los veintitantos esperando que llegue lo que ya está ocurriendo, viviendo de las historias que oigo, las historias de las que me empapo en series y cine, siendo normal y dejando mi vida desvanecerse entre mis propios dedos, sin apenas enterarme de que está pasando delante de mis propias narices, con tazas de café sí, pero rápidas y a escondidas.
Eres lo único que es real y algo que no puedo tener...
Echo de menos ver tu ropa en mis cajones repretados por el poco espacio, tu olor masculino, tus aspavientos, tu forma de mirarme de vez en cuando como si fuera la primera vez, tus risas provocadas por mis ironías alocadas en todo momento, el pensar en 2, el hace todo para 2, el ir a comprar juntos y tontear entre los pasillos cuando me dices que estás muy bien conmigo y que te encanta hacer esas cosas tan cotidianas...
En el momento en el que dejo escapar mis momentos y los tuyos...en los momentos que hago todo para una...en esos me doy cuenta de que sólo soy una, con vida normal y sin tazás de café con lluvia....
